Activismo de mínimos

Alguna gente en los últimos años nos hemos rebajado al activismo de usar y tirar y poco más, con acciones de poco calado y corto alcance.
Cierto es que rebajamos nuestras pretensiones para evitar la frustración.
Esa frustración por la que en ocasiones nuestra vida nos parece anquilosada, repetitiva, sin vida.
Ya es hora de comprometerse.
Comprometerse con una misma para cambiar _desde_ lo cercano.

Con cabeza, sin esperas (ni ahora ni luego), de largo recorrido, transformando(nos) de nuevo.