sábado, 27 de enero de 2018

Dejar grupos: cuando ya no (nos) compensa que nos quedemos


A veces, trabajar el desastre interno también implica cortar participaciones en grupos que nos reclaman demasiado tiempo (no compensan; siempre deben compensar) o en los que (¿ya?) no podemos aportar (¿más?). Es una muestra de salud saber mantener el flujo de comunicación que seremos capaces de soportar, de manera que:
a) Nos lleve un tiempo que no nos anule/aliene;
b) Nos suponga una carga emocional adecuada a nosotras;
c) Nos permita aportar o, al menos, estar al tanto de un grupo al que partenecemos también en persona;
c) Nos devuelva de igual manera que aportamos.



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